¿Quieres saber más sobre la popular técnica pictórica de la aguada? En este artículo, exploraremos su historia, las pinturas famosas creadas con gouache y los artistas destacados que han utilizado esta técnica. Un tipo de pintura vibrante y versátil que se originó en la ilustración de manuscritos medievales y se hizo popular en la Inglaterra del siglo XVIII. Sigue leyendo para descubrir el fascinante mundo de gouache.
Orígenes.
El gouache, una forma mágica de expresión artística, posee la extraordinaria capacidad de crear creaciones vivas, vibrantes y de colores intensos.
El término gouache proviene del italiano «guazzo», que originalmente se refería a una técnica de pintura sobre óleo o temple, y más tarde se asoció específicamente con una técnica que usa colores opacos mezclados con agua. «Guazzo» a su vez deriva del vocablo italiano «guazzo», que significa charco o poza de agua, probablemente haciendo alusión a la mezcla de agua con los pigmentos para crear la pintura.
El gouache se caracteriza por ser una pintura a base de agua que incluye una sustancia blanca, como el carbonato de calcio, para hacerla opaca y reflectante. Esto permite que el gouache cubra completamente las superficies sin dejar ver el fondo (a diferencia de las acuarelas, que también son con base de agua, pero transparentes).
SU HISTORIA se remonta a la Edad Media, donde encontró sus primeros comienzos como técnica utilizada en la ilustración de manuscritos. Durante este periodo, el gouache desempeñó un papel importante en la creación de intrincadas y coloridas ilustraciones, a menudo con escenas de textos religiosos y relatos históricos. Caracterizada por su cualidad opaca y luminosa, pronto se hizo famoso por los asombrosos efectos visuales que podía lograr, lo que lo convirtió en un medio muy codiciado tanto por los artistas como por los ilustradores.
Una de las características más notables del gouache es su versatilidad y adaptabilidad a diversos estilos y temas. La capacidad distintiva de la técnica para crear un acabado mate y aterciopelado con colores intensos y brillantes la diferenciaba de otros métodos de pintura de la época. Esta cualidad única hizo que fuera la primera opción de los artistas que buscaban producir obras de arte atrevidas y expresivas, sobre todo en el campo de la ilustración de manuscritos, donde los colores ricos y opacos podían dar vida a detalles intrincados y diseños elaborados de una forma sin parangón en comparación con otros medios.
Adquiere popularidad en la Inglaterra del siglo XVIII
En la Inglaterra del siglo XVIII, el gouache empezó a ganar terreno, siendo especialmente valorado por aquellos artistas dedicados a la ilustración, como en los delicados retratos miniatura, los diseños de moda, y los detallados estudios botánicos y zoológicos. En ese tiempo, había una auténtica fascinación por explorar y documentar el mundo natural, lo cual impulsó la demanda de ilustraciones precisas y visualmente atractivas, ya que el gouache se destacaba por su capacidad para producir colores intensos y una cobertura completa, ideal para enfatizar detalles en obras de pequeño formato. Además, una de sus grandes ventajas era que, si cometías un error, el gouache te permitía corregirlo con bastante facilidad, algo que no sucedía con técnicas más translúcidas como la acuarela.
Aunque el gouache era popular para estos fines, se utilizaba más que nada como una herramienta para ciertos tipos de trabajos ilustrativos y no tanto como una forma de arte elevada, aún no alcanzaba el estatus de prestigio que tenían las pinturas al óleo, las cuales dominaban el escenario artístico de la época. En esencia, el gouache era como ese recurso confiable y versátil, no siempre en el centro de atención, pero fundamental para el desarrollo artístico de la época, permitiendo a los artistas experimentar y destacarse de nuevas maneras, adaptándose a los cambios en las tendencias artísticas.
Pero su nueva popularidad en la Inglaterra del siglo XVIII estaba sentando las bases para su apreciación y utilización en siglos futuros, en campos como la ilustración botánica y científica, donde artistas como Pierre-Joseph Redouté comenzaron a explorar técnicas similares y marcó un punto de inflexión significativo para la técnica, ya que amplió su influencia más allá de sus orígenes y se estableció como un método reverenciado y apreciado de expresión artística en la escena artística internacional.
El Gouache en el siglo XIX
En el siglo XIX, aunque el gouache no era tan predominantemente destacado como medio independiente como lo sería más tarde, algunos artistas comenzaron a explorar su potencial, especialmente en obras sobre papel, ilustraciones, y estudios preparatorios. La información específica sobre artistas del siglo XIX que utilizaron exclusivamente el gouache es menos común, dado que muchos artistas de este período eran más conocidos por su trabajo en óleo o acuarela. Sin embargo, el gouache era apreciado por su capacidad para agregar detalles vibrantes y opacos a las obras, y fue utilizado por algunos artistas para ciertos efectos o como parte de su proceso creativo.
Pero es importante notar que muchos artistas del siglo XIX utilizaban el gouache como complemento a otras técnicas más que como el medio principal de sus obras. Además, la distinción entre acuarela y gouache no siempre era tan clara o relevante para los artistas de la época como lo es para los clasificaciones modernas del arte. Los artistas del siglo XIX tendían a explorar y mezclar medios para conseguir los efectos deseados en sus trabajos, por lo que el uso específico del gouache puede ser parte de un enfoque más amplio hacia la experimentación con materiales.
Entre los artistas de la época que utilizaron esta técnica destacan:
J.M.W. Turner (1775-1851): Experimentó con una amplia gama de medios y técnicas, incluido el gouache. Utilizó esta técnica para agregar luminosidad y detalles a sus paisajes y estudios atmosféricos.
Eugène Delacroix (1798-1863): Delacroix es famoso por sus pinturas al óleo, pero también creó una cantidad significativa de obras sobre papel, incluyendo acuarelas y posiblemente gouaches, que usó para estudios de color y composición. Sus diarios y estudios preparatorios revelan un interés por capturar efectos de luz y atmósfera que bien podrían haber incluido el uso de gouache para detalles o retoques.
Winslow Homer (1836-1910): También experimentó con gouache, especialmente en sus ilustraciones. Sus obras marítimas y escenas de la vida cotidiana a menudo mostraban un manejo magistral de la luz y el color, técnicas que aplicaba en diversos medios.
Siglo XX
Este siglo marca un punto de inflexión en la utilización del gouache. No solo se puso de moda, sino que se convirtió en una herramienta clave para algunos de los artistas más innovadores y revolucionarios de esa época. El siglo XX fue un periodo de grandes cambios y experimentación en el arte, y el gouache jugó su papel en este escenario vibrante.
Principios del siglo XX
Modernismo y más allá: En las primeras décadas, los artistas estaban buscando maneras de romper con la tradición y explorar nuevas formas de expresión. El gouache, con su capacidad para producir colores vivos y su facilidad de uso, se convirtió en un aliado para los artistas modernistas.
- Henri Matisse: Uno de los grandes del siglo, Matisse experimentó con el gouache de una manera única. Sus famosos «gouaches découpés» o papeles recortados son un perfecto ejemplo. Más adelante en su carrera, cuando la salud le impedía pintar con la misma facilidad de antes, Matisse empezó a cortar formas de papel pintado con gouache y a organizarlas en composiciones grandes y coloridas.
- Obras como «La Tristesse du Roi» son testimonio de su maestría y capacidad para innovar con este medio. En su serie «Jazz» (1947), demostró la versatilidad del gouache para crear formas audaces y colores intensos, liberando la expresión artística de los límites del lienzo tradicional.
Mediados del siglo XX
Expresionismo abstracto y más: A medida que avanzaba el siglo, el gouache se mantuvo como una opción popular para los artistas, especialmente aquellos interesados en la abstracción y en explorar la forma y el color por sí mismos.
- Paul Klee: Aunque Klee trabajó principalmente en las primeras décadas del siglo, su influencia perduró. Utilizó gouache para experimentar con color y composición (a menudo combinado con acuarela y tinta) creando obras que parecen casi mágicas en su complejidad y belleza. Klee utilizó el gouache para intensificar los colores y agregar profundidad a sus composiciones abstractas y simbólicas, reflejando su interés en la teoría del arte y la psicología del color. Sus técnicas ayudaron a establecer las bases para las exploraciones abstractas de las décadas siguientes.
La segunda mitad del siglo XX
Diversidad de estilos: En las décadas posteriores, el arte se diversificó aún más. El gouache se usó en una variedad de contextos, desde la ilustración hasta la creación de arte pop y conceptual.
- David Hockney: Un poco más adelante en el siglo, artistas como Hockney jugaron con el gouache para crear obras que exploraban la percepción, el espacio y la personalidad. Aunque Hockney es quizás mejor conocido por sus pinturas en acrílico y trabajos en otros medios, también ha utilizado el gouache para bocetos y estudios, demostrando la versatilidad del medio.
- Jean Dubuffet (1901-1985): Dubuffet, un artista francés asociado con el movimiento Art Brut, también experimentó con el gouache en su búsqueda de una expresión más auténtica y sin filtrar. Sus obras a menudo desafiaban las convenciones estéticas tradicionales y utilizaban el gouache para destacar texturas y crear efectos visuales que invitan a la reflexión.
El siglo XX fue un período de enorme experimentación y cambio en el mundo del arte, y el gouache jugó su papel en muchos de los movimientos y momentos clave. Desde el fauvismo y el modernismo hasta el arte pop y más allá, artistas de todo tipo encontraron en el gouache una herramienta valiosa para explorar ideas, emociones y nuevas formas de ver el mundo. La historia del gouache en este siglo es realmente una historia de innovación y creatividad sin límites.
En Resumen
El gouache no solo ha enriquecido el arte con su presencia, sino que ha sido un pilar en la evolución de la creatividad artística a través de los tiempos. Ha dejado una huella imborrable en la historia del arte, demostrando ser una técnica pictórica tanto versátil como expresiva. Su capacidad para generar colores vivos y su fácil manejo han abierto caminos de innovación y creatividad para artistas de todas las épocas. Desde las experimentales composiciones de Matisse hasta las detalladas ilustraciones modernas, el gouache ha facilitado una exploración artística sin precedentes, consolidándose como una herramienta fundamental en el desarrollo de nuevas formas de expresión visual.